Del campo al plato

Una empresa familiar de corazón que desahoga por completo a sus clientes. Eso es Calsa. Como renombrado exportador de frutas y hortalizas, el equipo lleva a diario productos frescos por todo el mundo. Incluida la gestión administrativa y el envasado a medida según el destino o la transformación posterior.

Calsa en cifras

Respaldamos nuestros productos 100%. Un número que puede contar. Con programas a medida para nuestros clientes, les ofrecemos exactamente lo que quieren, cuando lo quieren y como lo quieren. Diariamente fresco y con alta calidad garantizada. Hora de las estadísticas.

Exportaciones a más de 30 países

75% Belga

48000 toneladas al año

9% carga más eficaz

21 empleados, 1 equipo

No prevalece la cantidad, sino la calidad. Esto también se aplica al equipo que hay detrás de Calsa. Nuestros 21 empleados son hombres y mujeres de todas las edades. ¿Qué tienen en común?

Son unos cracks en su trabajo. Desde gestores de calidad hasta genios del lenguaje logístico. Hablamos el idioma de nuestros clientes, literal y figuradamente.

3 generaciones con visión

Calsa es una empresa familiar de corazón. Hoy, con Pol, Jeroen y Charlotte, la tercera generación ya está al timón.

El carácter familiar y su enfoque personal caracterizan el ambiente entre los empleados y en el trato con nuestros clientes.

Centrarse en la sostenibilidad

Calsa mira hacia el futuro. Eso significa prestar atención a la ecología. Por ejemplo, tenemos dos colmenas que contribuyen a que la población de abejas de nuestra región vuelva a crecer. También optamos por el anclaje local y nos centramos en asociaciones sólidas.

La mayoría de nuestros cultivadores son proveedores veteranos. Y nuestros clientes también son fieles. La transparencia y la confianza son el hilo conductor de nuestra red, a todos los niveles y en todos los contactos.